Las cepas probióticas son microogranismos vivos, por lo que es recomendable que estos mismos, estén frescos.
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LOTE ACTUAL: 05-03-2025 ¡Con caducidad hasta el 2027!
 
¡Disfruta nuestra formulación premium enfocada en tu ánimo!
 
Cada porción de Mood Probiotics Advance ofrece una combinación avanzada de 15 billones de Lactobacillus Helveticus y Bifidobacterium Longum; cepas probióticas con respaldo y reconocimiento clínico por su gran potencial en mejorar el ánimo y ansiedad.
 
Además, incluye Inulina de agave, prebiótico que favorece el crecimiento de cepas probioticas en el intestino, potenciando asi el efecto probiotico en la microbiota.

Esta formulación apoya el bienestar emocional a través del eje intestino/microbiota-cerebro, optimizando la comunicación entre el intestino y el cerebro para combatir la ansiedad.
 

Beneficios principales:
 
Regulación del estado de ánimo y reducción de la ansiedad:
La formulación específica de cepas Lactobacillus Helveticus con Bifidobacterium Longum ha sido desarrollada por su alto potencial para reducir los síntomas relacionados con la ansiedad. Estos probióticos influyen en el eje intestino-cerebro (eje microbiota-cerebro), ayudando así a modular la producción de neurotransmisores como la serotonina, que desempeñan un papel crucial en el estado de ánimo..
 
Modulación de neurotransmisores:
Esta formulación de cepas probióticas ayuda de manera específica y potencial a regular la producción de neurotransmisores como la serotonina y el ácido gamma-aminobutírico (GABA), que son fundamentales para la regulación del estado de ánimo y la ansiedad. La serotonina es conocida como la "hormona de la felicidad", mientras que el GABA es un neurotransmisor inhibidor que ayuda a reducir la actividad neuronal excesiva, induciendo una sensación de calma.
 
Reducción de la actividad en el sistema límbico:
Varios estudios clínicos han concluido que los probióticos como Lactobacillus Helveticus y Bifidobacterium Longum contribuyen a reducir la actividad en áreas del cerebro relacionadas con la ansiedad, como la amígdala y el hipocampo, que son partes claves del sistema límbico. Este sistema está directamente involucrado en la respuesta al estrés y las emociones negativas. Al modular la actividad en estas áreas, se contribuye a reducir el estrés, la ansiedad y equilibrar el estado de ánimo.
 
Reducción de la fatiga mental:
Una microbiota equilibrada, facilitado por la interacción entre las cepas probióticas y la inulina de agave, funcionan como auxiliantes para reducir la fatiga mental. Esto promueve una mejor claridad mental, concentración y energía durante el día.
 
Reducción del cortisol:
Esta formulación ha mostrado la capacidad de reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés. El cortisol elevado está asociado con la ansiedad y el estrés crónico. Reducir el cortisol puede contribuir a una sensación general de relajación y bienestar.
 
Mejora de la calidad del sueño: Varios estudios clínicos concluyen en que estas cepas especificas ayudan mejorar la calidad del sueño al regular el ciclo circadiano y promover una mayor sensación de relajación y bienestar.
 
Desinflamación intestinal: La inflamación crónica y la permeabilidad intestinal (también conocida como "intestino permeable") pueden contribuir al desarrollo de la ansiedad. Estos probióticos ayudan a reducir la inflamación intestinal y a fortalecer la barrera intestinal, lo que previene que sustancias inflamatorias ingresen al torrente sanguíneo y lleguen al cerebro, disminuyendo así la activación de respuestas ansiosas.
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Apoyo a la función cognitiva: El uso regular de  Lactobacillus Helveticus y Bifidobacterium Longum suele promover un mejor rendimiento cognitivo, gracias a la mejora en la comunicación entre la microbiota y el cerebro.
 
Fortalecimiento del sistema inmunológico: Al favorecer el equilibrio de la microbiota intestinal, las cepas probióticas contribuyen al fortalecimiento del sistema inmunológico. Se estima que aproximadamente el 70% del sistema inmune reside en el intestino, por lo que una microbiota saludable mejora significativamente la capacidad del cuerpo para defenderse de infecciones y enfermedades.
 
Desinflamación Sistémica: La inulina es un prebiótico, lo que significa que alimenta a las cepas probióticas en la microbiota. Al reducir la inflamación intestinal, disminuye la inflamación sistémica, lo cual tiene un impacto positivo en la salud mental y el potenical en reducir el riesgo de trastornos cognitivos y emocionales.
 
Mejora de la digestión: Las cepas probióticas y la inulina favorecen la salud digestiva al promover un equilibrio en la microbiota intestinal. Esto ayuda a mejorar el tránsito intestinal, previniendo problemas como el estreñimiento, la hinchazón, indigestión y diarrea.
 
Mejora del sistema óseo y metabolismo: La inulina de agave favorece el crecimiento de bacterias beneficiosas en la microbiota intestinal, lo que mejora la absorción de nutrientes clave como el calcio y el magnesio. Esta mayor absorción contribuye a fortalecer el sistema óseo y a mantener un metabolismo más eficiente, apoyando funciones esenciales como la formación y mantenimiento de los huesos y la regulación de los procesos metabólicos.